Hay negruras más oscuras que otras pero en el horizonte vacío del océano no distingo el negro mar del negro cielo. La luna nueva de mi deseo mimetiza las formas, disimula los miedos. Si rompiera a llorar en la noche ¿podría alguien saberlo? Quisiera alguna vez, tal vez quizás, cerrar esto que quedó abierto. Si me coso con punto cruz, al revés y al derecho, ¿seguiré estando entero? Y si me rompo de nuevo y de nuevo y de nuevo ¿quedará algo de mí para seguir cosiendo?
Hay negros más negros que otros negros, pero en la noche cerrada vuelvo mi ojo hacia el futuro y no puedo verlo.
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